dimecres, 26 de febrer del 2014

«El acoso no es una broma»

http://www.diariodeibiza.es/pitiuses-balears/2014/02/26/acoso-broma/677609.html
Agentes de toda la isla asistieron a la presentación de la memoria de los policías tutores.

Los policías tutores señalan que el apoyo de las familias es primordial para que los menores cambien su conducta | Los agentes niegan que «la mala fama» de algunos centros sea cierta

26.02.2014

Hasta diez casos de acoso escolar «grave» detectaron y atendieron los policías tutores de las Pitiusas. Esta es una de las situaciones que más preocupa a los agentes, según confesaron ayer durante la presentación de la memoria de este servicio Gabriel Morro y Juan Carlos González, dos de estos profesionales.

Morro destacó que cada vez se detectan antes este tipo de situaciones, aunque reconoció que todos los colectivos relacionados con la educación deben «seguir trabajando» para acabar con el acoso en las aulas. «En el caso de robos, hurtos o daños al material y las instalaciones es fácil detectar quién lo ha hecho y que esa persona lo asuma, pero el acoso es mucho más complejo», apuntó González. Este agente señaló que a los adolescentes les cuesta entender que el acoso «no es una broma sino un delito» y que es «difícil de detectar».

«Yo creo que no hay maldad, es más bien que los alumnos no entienden cuándo traspasan la línea de la broma», apuntó Morro, que insistió en que se trata de un problema «importante». El agente destacó la necesidad de «concienciar» a los adolescentes para «intentar que, con el tiempo, los casos de acoso en las aulas sean cada vez menos». «No podemos permitir que haya chicos que tengan miedo de ir a clase porque saben que se van a burlar de ellos o que les van a agredir», reiteró Morro.

El agente destacó que para solucionar tanto estos casos como todos los demás que ponen en conocimiento de los padres es indispensable la colaboración de la familia. «Si en casa critican lo que estamos haciendo, no sirve de nada intentar que ese menor cambie su actitud», comentó Morro, que señaló que la mayoría de las familias «agradecen» enterarse de lo que están haciendo sus hijos. En este sentido, aseguró que la mayoría de las veces los padres no son conscientes, hasta ese momento, de su comportamiento. De hecho, González destacó que ya están comenzando a impartir conferencias dedicadas a los padres para explicarles la función de los policías tutores y los problemas más habituales que atienden.
Este policía quiso acabar con el mito de «la fama» que tienen algunos centros y aseguró que realizan actuaciones en todos ellos. «Sabemos que es algo que preocupa a los padres cuando sus hijos tienen que comenzar la Secundaria», reconoció el agente, que matizó que la labor de los policías tutores se centra en los colegios e institutos públicos o concertados. A pesar de esto, detalló que también acuden –«cuando lo solicitan»– a centros privados. «Con el tiempo nos hemos dado cuenta de que en todos los centros la mayoría de las intervenciones se producen con un grupo reducido de alumnos», comentó el agente. De hecho, aseguró que los menores que ocasionan la mayoría de las actuaciones en cada instituto son, generalmente, entre cinco y diez.

Además, indicó que su labor se centra cada vez más en los alrededores de los centros educativos e, incluso, en las casas de los menores. «Cuando expulsan a un alumno, verificamos que el niño está en su casa haciendo las tareas que le han mandado para esos días los profesores», puso como ejemplo González, que recordó que una expulsión es un castigo, por lo que el menor no puede estar divirtiéndose fuera de casa. Otra de sus labores es identificar a las personas que ven cerca de los institutos, tanto si sospechan que se dedican «a pequeños tráficos de droga», como si se trata de menores que acuden a visitar a amigos que tienen en el centro.

Los agentes destacaron que, a pesar de que la figura del policía tutor está pensada para todos los centros educativos, la gran mayoría de sus intervenciones se centra en los institutos.